Una hembra de dragón de Komodo tiene 5 crías sin ser fecundada por un macho

Una hembra de dragón de Komodo, los lagartos de mayor tamaño del mundo, ha tenido cinco crías sin necesidad de ser fecundada por un macho, acontecimiento que ha aportado una gran dosis de esperanza a la reproducción en cautividad de especies en peligro de extinción.

Flora, como se llama el animal del zoo de Chester (norte de Inglaterra), puso en mayo pasado una nidada de 11 huevos sin que se la hubiera cruzado con un macho de su especie.

Las primeras cinco crías en salir del cascarón tras ocho meses de gestación se han convertido en otros tantos dragoncillos de entre 40 y 45 centímetros de largo y un peso que oscila entre los 100 y los 125 gramos.

Se trata del segundo caso documentado de reproducción asexual en dragones de Komodo, un proceso conocido como partenogénesis, que se registró por primera vez el pasado abril en el zoo de Londres, cuando Sungai puso huevos dos años y medio después de su último contacto con un macho.

"Flora ignora la emoción que ha causado su parto, mientras nosotros estamos encantados en anunciar que ya es madre y padre a la vez", ha afirmado tras el nacimiento de los dragones el encargado del zoo de Chester, Kevin Buley.

Según recogía un grupo de científicos británicos en el número de diciembre de la revista Nature, el hecho de que se hayan producido dos casos de partenogénesis en dos zoos diferentes sugiere que esta facultad de fecundarse a sí mismos podría no ser algo inusual cuando los dragones de Komodo se encuentran aislados.

Lo ocurrido en los dos zoos británicos puede tener consecuencias de gran alcance para las especies en peligro de extinción, porque la cría en cautividad podría asegurar la supervivencia de los tan solo 4.000 dragones de Komodo que viven en su hábitat natural, lagartos que en la edad adulta pueden llegar a medir tres metros y pesar hasta noventa kilos.

Los científicos, que por el momento desconocen si la hembra de Komodo ha tenido siempre la capacidad de reproducirse sin necesidad de un macho o si se trata de un nuevo desarrollo evolutivo, cifran en 70 las especies que han registrado casos de partenogénesis, entre las que se incluyen serpientes y lagartijas.