Hungría sacrifica otras 9.500 aves de corral ante la sospecha de un segundo brote de gripe aviar

El veterinario general de Hungría, Miklós Süth dijo ayer a la prensa que los primeros análisis "hacen muy probable" la presencia de la gripe aviar en un foco hallado el lunes, cerca del confirmado esta semana, por lo que se sacrificaron más de 9.500 aves de corral de forma preventiva.

Süth explicó que después de haberse registrado la muerte de varias aves de corral en Derekegyháza, en el sur de Hungría, las autoridades han establecido las zonas de protección y de vigilancia pertinentes, de radios de tres y diez kilómetros, respectivamente, según recoge la prensa local.

El veterinario agregó que en la zona de vigilancia analizarán todas las aves de corral, y a pesar de que el proceso no ha finalizado, adelantó que hasta el momento no han encontrado nuevos casos "sospechosos".

La Unión Europea (UE) ha aceptado las medidas tomadas en Hungría para frenar el virus H5N1, por lo que "los países de la Unión no pueden imposibilitar la importación de aves de corral", añadió la portavoz del gobierno magiar, Emese Denks, aludiendo a que Rumanía consideró frenar las importaciones.

El director general adjunto de la Organización Internacional de Salud Animal (OIE), Jean-Luc Angot informó que el virus de la gripe aviar detectado en granjas en Hungría en los últimos días es idéntico al que contaminó a Europa el año pasado.

Hungría sacrificó el año pasado varios cientos de miles de aves de corral por la presencia de la cepa H5N1 en 64 aves silvestres infectadas en el territorio del país, en su gran mayoría cisnes.