Varias generaciones de veterinarios se dieron cita en el Homenaje Profesional 2007, un acto emotivo, divertido y festivo a la vez

El pasado jueves, en la discoteca Lokua de Madrid, tuvo lugar la celebración de la Fiesta Homenaje Profesional 2007 en la que el Colegio de Veterinarios de Madrid reconoció de manera oficial la labor de trece veterinarios con una dilatada y exitosa carrera profesional en los diferentes ámbitos de la medicina veterinaria. Un acto que reunió  a varias generaciones de veterinarios que pudieron compartir experiencias y disfrutar de una velada emotiva, divertida y de la que seguro que siempre tendrán un buen recuerdo todos los presentes.(VER VIDEO)

El acto, presentado por el periodista José María Alfajeme, gran amante de los animales, comenzó con un breve discurso del Presidente del Colegio de Veterinarios de Madrid, Felipe Vilas, quien se refirió a la labor de los profesionales homenajeados como “difícil” ya que en la época en la que comenzaron a ejercer, no existían los medios técnicos, de diagnóstico ni los tratamientos con los que contamos ahora . “Sus logros en medicina veterinaria han sentado las bases sobre la que se han sustentado las generaciones posteriores”, destacó Vilas. “Por eso, el Colegio ha promovido la creación de este merecido homenaje del que ya es su segunda edición”.

Tras la presentación, comenzó la entrega de insignias y placas conmemorativas a los homenajeados, empezando por los clínicos de pequeños animales. José Ramón Escribano, presidente de AMVAC (Asociación Madrileña de Veterinarios de Animales de Compañía), fue el encargado de hacer una breve introducción y a continuación hizo entrega de la placa e insignia al primero de los homenajeados, Eduardo Polo Lozano quien no pudo contener la lágrimas en varios momentos de su discurso lo que arrancó aplausos de ánimo entre el público asistente. Esta emotividad continuó patente en el resto de homenajeados lo que contribuyó a hacer de esta celebración un día inolvidable para todos los presentes.

Manuel Lázaro, vocal de la Junta de Gobierno del Colegio de Veterinarios de Madrid (ICOVM), entregó su placa a José Gutiérrez Aguado. José Zúñiga Jiménez, socio fundador de AMVAC y vocal de la junta de Gobierno del ICOVM, recibió su reconocimiento de manos de su compañero en ambas instituciones, Benito Pérez. Zúñiga, emocionado, recordó la creación de AMAVAC, 28 años atrás y destacó el gran avance  que la medicina veterinaria ha experimentado en estos años.

A continuación, María Castaño, miembro de la Junta del ICOVM, entregó su placa a Felipe Sánchez Aguado y tras ello, Ana Pérez, vicepresidenta del ICOVM, hizo entrega de la placa y la insignia a la única mujer homenajeada, Antonia García de Vinuesa.

Tras ellos, José Luis Iglesias, secretario del ICOVM, entregó la placa a Ezequiel Martín García. Después, Manuel García, vocal de la Junta de Gobierno del ICOVM entregó su placa a Manuel Mármol del Puerto y, por último, José Capaces, representante de AVEPA, fué el encargado de entregar la placa a José Parla Muñoz.

En la categoría de clínica equina, Pablo Adrados, presidente de AEVEE (Asociación Española de Veterinarios Especialistas en Equidos), hizo una pequeña presentación de los homenajeados y entregó la placa a Conrado Núñez Núñez. El Presidente del ICOVM, Felipe Vilas fue el encargado de hacer lo mismo con el otro representante de esta categoría, José Luis Pinedo González.

En la especialidad de medicina avícola, José Pacheco Benito (quién recitó un poema compuesto por él) fue el que recibió la placa y la insignia de manos de Ricardo Martínez Alesón, representante de la AECA (Asociación Española de Avicultura Científica).

Por último, se entregaron los reconocimientos a la trayectoria de dos veterinarios dedicados a la medicina bovina. Joaquín Baucells, de ANEMBE, (Asociación Nacional de Especialistas en Medicina Bovina) entregó su placa a Francisco García Navazo y José Zúñiga a Antonio González Cobo, con quien se fundió en un abrazo lleno de emoción.

Una vez relaizada la “foto de familia” comenzó a servirse un magnífico coktail y tras ello, el presentador dio paso a una actuación del mago y humorista Luis Boyano que arrancó risas y aplausos a partes iguales entre el público asistente.

Una vez finalizada su actuación,  la pista de baile se llenó de gente disfrutando de un fin de fiesta agradable y distendido que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.

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