La ONU destaca el papel de los servicios veterinarios en la mejora de la respuesta frente a la gripe aviar a nivel mundial

El intenso esfuerzo global por controlar la gripe aviar ha conseguido mejorar en muchos países la respuesta a la aparición de nuevos brotes, aunque permanece el riesgo de que el virus altamente contagioso provoque una pandemia, afirma un informe de la ONU y el Banco Mundial (BM) dado ayer a conocer.

El estudio recoge el progreso logrado en los dos últimos años en la contención de la gripe aviar y la tarea de prevenir que su
posible transmisión a los seres humanos se convierta en una pandemia que cause la muerte de millones de personas.

Según sus conclusiones, la amenaza que representa esta enfermedad ha obligado a numerosos gobiernos a modernizar los mecanismos de detección, contención y reducción del impacto de este peligroso patógeno.

Sin embargo, un buen número de estos planes "no tienen una suficiente capacidad operativa y se debe prestar más atención a la planificación entre países".

"No podemos decir que la labor se ha terminado, más bien que se está cumpliendo con el trabajo", apuntó el coordinador de Naciones Unidas para la Gripe Aviar, David Nabarro, en la presentación del estudio.

Nabarro destacó la mejora de los servicios veterinarios en numeroso países a la hora de detectar desde un principio la
aparición de brotes entre las aves de corral y tomar medidas para contenerlos, además de en la vacunación en los últimos dos años de millones de animales.

A eso se une la elaboración de planes gubernamentales de contingencia en casi todos los países, y el hecho de que en un 20
por ciento de ellos se hayan realizado simulacros para estudiar su efectividad.

Pero Nabarro advirtió que el progreso logrado no puede convertirse en complacencia y llevar a bajar la guardia ante una
enfermedad tan contagiosa.

Nuevos brotes siguen produciéndose en seis países periódicamente, por lo que sólo se necesitaría que una mutación contagiosa del virus pasara a una gran población de aves migratorias o un cambio en temperaturas favoreciera su incubación, para enfrentarnos de nuevo al temor que en 2005 causó la aparición de la gripe aviar, agregó.

Los países mencionados son Indonesia, China, Vietnam, Bangladesh, Egipto y Nigeria, donde las autoridades han aprendido a responder rápidamente a la reaparición del virus, agregó.

El estudio recuerda la advertencia del informe anual 2007 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el que se señala que
"habrá una pandemia de gripe tarde o temprano", con las consiguientes graves consecuencias en víctimas mortales e impacto
económico.

La mortífera cepa H5N1 del virus se ha transmitido rápidamente en los últimos tres años desde el sureste asiático, al norte y este de Africa, Europa central y hasta países occidentales como Gran Bretaña.

Su presencia se detectó en 15 países en 2005, y un año después, eran ya 55.

En Indonesia, el país más afectado del mundo por la gripe aviar, 91 personas han fallecido en los últimos años tras resultar
infectadas con la cepa H5N1.

En todo el mundo, un total de 334 humanos se han contagiado con el virus, de los que 205 fallecieron, según estadísticas de la OMS.

El informe preparado con información recibida de 146 países formará parte de la agenda de la cumbre ministerial sobre gripe
aviar que se celebrará del 4 al 6 de diciembre en Nueva Deli.