Se han celebrado las "II Jornadas de Orientación Profesional", con la colaboración del Colegio de Veterinarios de Madrid

Durante los días 11, 12 y 13 de abril se han celebrado en la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid las “II Jornadas de Orientación Profesional Veterinaria”. Estas jornadas son la continuación de una iniciativa, que comenzó hace algunos años y se consolidó el año pasado, de la Delegación de Alumnos de la Facultad de Veterinaria, apoyada por la Universidad Complutense y por la propia Facultad de Veterinaria, por el Ilustre Colegio de Veterinarios de Madrid (ICOVM) y por otras empresas patrocinadoras (Acalanthis, Anaporc, Fort Dodge, Hill’s y Schering-Plough).

La asistencia a las jornadas fue significativa, algo menor que el año anterior, y se celebraron en un ambiente profesional, aunque a veces  distendido y casi familiar. Durante su celebración se cumplió el primer año del Aula permanente de Orientación Profesional del ICOVM en la Facultad de Veterinaria.

En estas jornadas participaron reconocidos profesionales de muchos aspectos de la profesión veterinaria (Enrique Tabanera, Enric Marco, Alicia Lafora, Benito Pérez, José Luís Puchol, Juan Carlos Abad, Jaime Feced, Isabel Cid Romero, Alejandro Tiana Mariscal, José Manuel Durán, Luís Fernando Díaz, Javier Blanco, Víctor Briones, Ana Pérez, Javier Camblor, Janet Ciudad, Javier Capilla) que dieron su visión de la situación actual y futuro de la veterinaria.

En el acto de inauguración intervinieron el Vicerrector de Estudios y Títulos propios de la UCM D. Manuel Rodríguez, el Presidente del ICOVM, D. Felipe Vilas, el Decano de la Facultad de Veterinaria D. Joaquín Goyache, la Vicedecana de Alumnos Dña. Marta González y un representante del comité organizador D. David Castillo.


De izquierda a derecha: Marta González, Joaquín Goyache, Manuel Rodríguez, Felipe Vilas y
David Castillo


Una de las conclusiones de estas Jornadas es que la tasa de desempleo dentro de los licenciados en veterinaria es casi nula, ya que casi todos encuentran puestos de trabajo en poco tiempo, pero no siempre es el puesto deseado ni las condiciones son óptimas o los sueldos son altos si se compraran con otros licenciados. Este es un problema que puede ser solucionado, en parte, con la creación de un convenio que regule la profesión veterinaria.

Otro de los hechos sobre los que se hizo especial hincapié fue que, después del periodo de estudios en la Facultad, es conveniente realizar estudios de postgrado. La sanidad animal, poco a poco, evoluciona hacia la medicina preventiva, ya que no basta solo con tratar los problemas sino que hay que evitar que aparezcan. El mercado de trabajo en las clínicas veterinarias tiende hacia la desaparición de las más pequeñas y la aparición de clínicas de tamaño medio o grande donde existan especialistas clínicos para las diferentes ramas. Algunos de estos son los reconocidos  por las diferentes escuelas europeas de especialistas

La formación de postgrado también es importante para el resto de veterinarios que no se dediquen a la rama de la medicina animal, ya sea en forma de máster (p.ej. en seguridad alimetaria, como el que actualmente ofrece el ICOVM) o formación especifica en otros campos (veterinario militar, forense, de espectáculos taurinos…).
 
Dentro del ámbito rural, la veterinaria ha sufrido grandes cambios en los últimos tiempos. El sector ha variado su estructura y se ha pasado de existir muchas explotaciones con pocos animales, donde lo importante era cada animal, a que sólo sobrevivan un reducido número de grandes explotaciones, donde la medicina individual pierde importancia a favor de una medicina preventiva. Al mismo tiempo, los veterinarios han pasado a trabajar en equipos, en vez de hacerlo de forma individualizada, para asesorar a las empresas ganaderas. Muchas veces el sueldo del veterinario debe ser complementado con otras actividades como el control en festejos taurinos, en monterías, peritajes, clínicas propias…

Como conclusiones finales se podría decir que:

· Es necesario disponer de movilidad, ya sea dentro del territorio nacional o en el extranjero, para aprovechar las mejores ofertas de trabajo.
· La importancia vital de los idiomas en un mundo globalizado hace que sea necesario como mínimo dominar el inglés. Además, saber una segunda lengua extranjera puede ayudar a ser seleccionado frente a otros candidatos a un puesto.
· La formación no termina con la finalización de la carrera. Para ser competitivos hay que mantenerse al día en todos los avances técnicos y científicos y eso obliga a una formación continuada.
· La imagen debe cuidarse en todo momento. Tanto en una entrevista de trabajo o en el ejercicio diario de nuestra profesión, mantener una imagen correcta es considerado sinónimo de buen profesional, lo que transmite confianza a los clientes y mejora la consideración de la opinión pública hacia nuestra profesión.
· No hay que descuidar aquellos puestos de trabajo que se llevan realizando tradicionalmente por los veterinarios porque van siendo ocupados por otros licenciados y diplomados en otras disciplinas y que no siempre llegan al nivel de conocimientos técnicos y teóricos que poseen los veterinarios.