La CE asegura que el Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos es ahora "más eficaz que nunca"

El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF, por sus siglas en inglés), una importante herramienta en el esfuerzo de la Unión Europea (UE) para garantizar que los alimentos sean seguros, es en la actualidad "más eficaz que nunca", asegura la Comisión Europea (CE) ahora que se cumplen 30 años de la creación de este instrumento.

Así, en el informe anual sobre este sistema para el año 2008, dado a conocer esta semana, se observa que el número de notificaciones de alerta se ha reducido en casi la mitad en 2008 en comparación con 2007. "Esto no significa que hubiera menos problemas que comunicar en 2008, sino, más bien, indica que, en la actualidad, los que contribuyen al sistema se centran mejor en los riesgos y solamente los clasifican como notificaciones de alerta si los consideran graves", apunta el Ejecutivo comunitario.

Bruselas indica que el sistema RASFF hizo frente durante el pasado año a algunos de los incidentes en materia de seguridad de los alimentos más importantes de los últimos años. Entre otros casos, se descubrió aceite mineral en aceite de girasol procedente de Ucrania (39 países afectados y 99 notificaciones de seguimiento), se halló melamina en alimentos procedentes de China (incidente con impacto mundial, 84 notificaciones RASFF y 101 notificaciones de seguimiento) y se detectaron trazas de dioxinas en la carne de porcino procedente de Irlanda (54 países afectados y 230 notificaciones de seguimiento). El sistema RASFF contribuyó en todos los casos a coordinar las medidas tomadas por los Estados miembros y, de esta manera, redujo al mínimo las consecuencias de los incidentes de contaminación, afirma la CE.

En el informe anual RASFF se desglosa el número total de notificaciones de 2008 en notificaciones de alerta (528), para información (1.138) y de rechazo en la frontera (1.377). Las notificaciones de alerta se envían cuando el alimento o el pienso que presenta un grave riesgo ya se encuentra en el mercado y deben tomarse inmediatamente medidas. La mayoría (62 % ) de las notificaciones de alerta de 2008 hacía referencia a productos originarios de la UE y la mayor parte de estos problemas se detectaban mediante controles efectuados en el mercado, explica la CE. Dentro de esta categoría de notificaciones, entre los riesgos más frecuentemente comunicados que se descubren en los alimentos y los piensos se encuentran los microorganismos potencialmente patógenos, los metales pesados y las micotoxinas.

Las notificaciones para información se envían cuando se ha descubierto un riesgo, pero no es necesario que los otros Estados miembros tomen inmediatamente medidas, detalla el Ejecutivo comunitario. En 2008, la mayor parte de las notificaciones para información (54 % ) tenía por objeto productos originarios de terceros países. Dentro de esta categoría de notificaciones, entre los riesgos más frecuentemente comunicados se encuentran los microorganismos potencialmente patógenos, los residuos de plaguicidas y los aditivos alimentarios.

Además, durante el pasado año se añadió un nuevo tipo de notificación, los rechazos en la frontera, que anteriormente formaban parte de las notificaciones para información, apunta Bruselas. Se trata de notificaciones sobre productos a los que se ha denegado la entrada en la UE y que se han dirigido a otro destino o han sido destruidos. En el 56 % de los casos de productos que fueron rechazados en la frontera, el motivo era que tenían unos niveles de micotoxinas demasiado elevados.

Fuente: CONSUMER