Madrid pondrá en marcha en septiembre un servicio telefónico específico de consulta sobre la gripe A

A partir del 15 de septiembre, la Comunidad de Madrid pondrá en marcha un dispositivo de asistencia telefónica específico para la gripe A. Estará ubicado dentro del Centro de Emergencias, que centralizará las llamadas, y podrá atender hasta 40.000 al día.

«Si son informativas se derivarán a un grupo de 175 operadores preparados para resolver cuestiones generales sobre la enfermedad. Si fueran asistenciales se desviarían al Centro de Coordinación del SUMMA, atendidas por personal médico y de enfermería -1.000 profesionales-», explicó el consejero de Sanidad madrileño, Juan José Güemes. Se valorarán los síntomas de la persona que ha marcado el 112, se darán consejos al paciente -reposo, hidratación, antitérmicos para controlar la fiebre- y se le proporcionarán los recursos necesarios -por ejemplo, el envío de una ambulancia a su domicilio si fuera un caso grave-.

Tres son los objetivos. El primero, reforzar los canales de comunicación con que cuenta la población. El segundo, asegurar la respuesta del sistema sanitario. Y el tercero, «evitar el colapso de los servicios de urgencias y centros de salud en los momentos de mayor incidencia de la gripe. Así se reduce, al mismo tiempo, la propagación del virus», señaló Güemes.

La línea telefónica se enmarca dentro de la estrategia diseñada por el Ministerio de Sanidad y Política Social para combatir la pandemia. La Consejería de Sanidad madrileña, además, tiene previsto distribuir dos millones de folletos informativos y carteles que incidan en las medidas preventivas y en cómo actuar ante los síntomas. También está «ultimando» el Plan de Contingencia en los hospitales y el resto de centros sanitarios para garantizar una respuesta «ordenada».
G
üemes aprovechó la ocasión para facilitar datos sobre la incidencia de la nueva gripe en la Comunidad de Madrid: 11 casos por cada 100.000 habitantes a la semana; «sensiblemente por debajo de la media nacional (32)». E hizo hipótesis sobre el peor escenario al que podría enfrentarse la Autonomía: una tasa de ataque del virus que afectara a más del 30 por ciento de la población; «muy parecida a la que probablemente se observe en el resto de España y de los países europeos».

Fuente: ABC