De izquierda a derecha: Luis Miguel Cebrián, Felipe Vilas y Alfonso Monge 

Durante la jornada, se desarrolló un programa multidisciplinar en el que intervinieron diversos expertos como José Luis Sáez Lorente (en la imagen de abajo), Jefe de Servicio de Acuerdos Sanitarios de la Subdirección General de Sanidad de la Producción Primaria del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, que expuso una interesante ponencia sobre el Programa Nacional de Erradicación de la tuberculosis bovina en el contexto europeo; Christian  Gortazar, investigador especialista en fauna silvestre autor de publicaciones científicas sobre temas relacionados con las micobacterias; Alicia Aranaz, investigadora y experta en diagnóstico laboratorial de la tuberculosis; y Elena Cebeda, veterinaria con una amplia experiencia en la gestión de explotaciones de vacuno y bioseguridad.

El programa de erradicación de la tuberculosis bovina 2008-2010 presentado a la Unión Europea para su cofinanciación es el marco actual que engloba la tuberculosis bovina y en el que se establece como objetivo último la erradicación de la enfermedad.

El problema de la erradicación es la existencia de gran variedad de sistemas de explotación, una epidemiología compleja y medidas que deben mantenerse durante mucho tiempo.

Con medidas estrictas, este tipo de enfermedades se pueden erradicar como ha sucedido en otros países. Los servicios veterinarios competentes son los responsables principales de la erradicación. El éxito se basa en un compromiso común y una estrategia racional. Es esencial que todas las partes involucradas contribuyan asumiendo sus responsabilidades. Las restricciones a los movimientos son esenciales.

La evolución de los indicadores epidemiológicos ha sido favorable en los últimos años, salvo en 2006, año en que se introdujeron cambios importantes en la sensibilidad del diagnóstico, dado que la evolución del programa se había estancado. La prevalencia de rebaños en el año 2007 fue del 1,63 %

En 2008  se ha completado el aumento en la sensibilidad del diagnóstico iniciada principalmente en 2007. El descenso es leve, con previsiones de mayor avance en 2009 y 2010. Ha habido un retroceso importante en Castilla la Mancha, Madrid, Andalucía y La Rioja.  Estable en Navarra, País Vasco y Valencia y se ha registrado un buen avance en las demás. Baleares es la primera Comunidad Autónoma en conseguir prevalencia 0.