La ACNV pide evitar comunicados que pongan en duda la competencia de sus veterinarios y creen alarma “injustificada” entre los consumidores

La Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (FESVET) publicó esta semana un comunicado en relación con la posible unificación bajo la dirección funcional del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de los servicios que se prestan en las fronteras en el ámbito de la sanidad exterior, para el control de las mercancías que se importan y exportan desde nuestro país a países no comunitarios.

Ante esta información, desde la Asociación del Cuerpo Nacional Veterinario (ACNV) han considerado necesario realizar algunas “puntualizaciones”, recordando en primer lugar que son “la única organización que agrupa a la inmensa mayoría de los veterinarios que prestan sus servicios como funcionarios del Estado, y por ello, tienen atribuidas las funciones de control en las fronteras españolas de los productos que se importan y exportan”.

“Los profesionales del Cuerpo Nacional Veterinario (CNV), adscritos funcionalmente en su mayoría al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, disponen de la máxima cualificación para la realización de los controles a las mercancías, productos de origen animal y animales vivos que se importan en nuestro territorio, tanto en los campos de la sanidad animal, la salud pública el bienestar de los animales y otras características de los animales y productos de origen animal que se importan en nuestro territorio”, defienden.

Por tanto, sostienen que la realización de los controles por parte de estos profesionales, tiene por objeto “responder de manera transversal a todas las demandas que hoy día realizan los ciudadanos respecto de los productos importados que llegan a sus hogares”.

“No existe, en ningún caso, riesgo de ‘conflicto de intereses’ por el hecho de que sean estos profesionales, adscritos al MAPA, quienes realicen tales controles. Muy al contrario: no sólo su formación y su visión es la más completa, sino que este es el enfoque que se ha adoptado en la práctica totalidad de los países de la Unión Europea”, afirman.

En este sentido, señalan que los funcionarios del CNV, “independientemente de la Administración Pública a la que están adscritos funcionalmente, desempeñan con diligencia las tareas que tengan asignadas velando en todo momento por el interés general con sujeción a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico”.

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