Francia cumple su objetivo de reducir el consumo de antibióticos en animales
En 2.002, el Ministerio de Asuntos Sociales y el de Agricultura franceses, emitieron un informe en el que denunciaban el abuso de la utilización de antibióticos para los animales y los riesgos que eso supone en la alimentación humana. Los autores de la investigación estiman que los veterinarios y los farmacéuticos participan "ampliamente en esa deriva" y los ganaderos escapan con facilidad a los controles y a las sanciones.
Los riesgos de ese comportamiento para la salud pública, según el informe, son tres: restar importancia a los medicamentos y, por tanto, un exceso de su consumo; un mal uso de los mismos y un riesgo de residuos en la alimentación humana; así como un insuficiente seguimiento del animal desde la granja hasta el matadero.
Así pues, en el 2.003 en Francia se redujo el consumo de antibióticos casi un 3 % con respecto al año anterior. Para controlar las ventas de estos fármacos la administración francesa colabora con el Sindicato de la Industria del Medicamento Veterinario. Mediante un cuestionario que se remite a los distribuidores, se cotejan las cifras con las que ofrece la Agencia Nacional del Medicamento Veterinario.
Las tetraciclinas suponen un 50 % de las ventas totales . De estos antibióticos, el 90 % se administran a animales destinados a consumo humano. Los autores del informe abogan por endurecer los controles y las sanciones e incluso retirar las ayudas europeas a los ganaderos que abusen de los antibióticos para engordar a sus animales.