España cree "insuficiente" la ayuda de 150 millones que propone la CE para compensar al sector

La ministra de Medio Rural, Rosa Aguilar, ha tachado de "insuficiente" la ayuda de 150 millones que la Comisión Europea ha ofrecido para compensar a los agricultores por las pérdidas causadas por la bacteria "E.coli". A España "no nos parece suficiente que se plantee el 30 por ciento del valor de retirada y por tanto lo vamos a manifestar con claridad en el marco del Consejo".

De hecho, tampoco el comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, ha respondido si es suficiente o no para compensar las pérdidas, sólo es "lo que podemos hacer".

La ministra quiere que se compense el cien por cien de las pérdidas, aunque no ha dado cifras concretas porque "el daño causado no ha cesado", al no conocerse todavía el origen del problema. La cifra final no se dará hasta que se conozca el origen de la bacteria y "se normalice la situación de mercado y recuperemos la confianza".

La Comisión Europea propone una ayuda de hasta 150 millones de euros para compensar a los productores hortofrutícolas afectados por la caída de ventas por el brote. Se trataría de una ayuda adicional a las que ya están establecidas dentro de la Política Agrícola Común (PAC), como las ayudas a la intervención y las de Estado.

Esta nueva ayuda cubriría el período desde el comienzo de la crisis hasta finales de junio, con lo que favorecería tanto a los agricultores encuadrados en organizaciones profesionales como a los independientes.
 
España y otros países han suscrito un documento en el que piden que la UE haga una relación de los productos más afectados por la crisis y "que se responda a los productores con el cien por cien o el noventa por ciento del valor de mercado, "dependiendo de los productos".
 
Además, según Aguilar, en el encuentro pidió otras medidas, en particular el anticipo "a la mayor brevedad posible" de una parte de las ayudas, "porque el sector necesita liquidez" y que se "aborden campañas que permitan recuperar mercado y confianza en los consumidores y dejar claro que los productos españoles son productos seguros, de calidad y tienen unos precios adecuados".

La campaña, según Aguilar, debería orientarse, en primer lugar, a explicar la variedad y calidad de los productos hortofrutícolas así como los sistemas de producción y de control de calidad y trazabilidad; y en segundo lugar, fomentar el consumo en base a las características intrínsecas de estos alimentos.

El desencadenamiento de esta crisis del sector hortofrutícola tuvo lugar el 25 de mayo cuando la senadora de Salud de Hamburgo comunicó a la prensa que el brote, que en ese momento había causado la muerte de tres personas, podía tener su origen en el consumo de pepinos de origen español. Tales declaraciones llevaron a la Comisión Europea a decretar, el día 26 de mayo, una alerta alimentaria que fue retirada el pasado día 1 dada la existencia de datos absolutamente concluyentes de ausencia de la cepa 0104 de E.Coli tanto en los pepinos como en el agua y en el suelo.

La declaración de la alerta sanitaria provocó la cancelación de pedidos de la UE y el cierre de fronteras de Rusia y Líbano, al tiempo que EEUU y Canadá están analizando exhaustivamente todos los productos procedentes de la UE, incorporando requisitos de importación temporales.

En este escenario, se ha constatado una caída generalizada del consumo en los países de destino tradicionales de las exportaciones de España, afectando no sólo a los pepinos sino a los productos frescos en general.

Dentro de la UE, los mercados que más se han resentido han sido los de Alemania y Francia.

La producción de hortalizas y patatas de España alcanza un valor de 8.800 millones de euros, de los que 3.900 millones de euros se corresponden con exportaciones a la Unión Europea. El empleo asociado al sector hortofrutícola español es de 300.000 puestos de trabajo.

Fuente: AGROCOPE