Hallado en Atapuerca un fémur de un antepasado del hombre de hace 500.000 años

Un hueso de fémur del "Homo heidelbergensis", el antepasado de 500.000 años de antigüedad que fue capaz de dominar el fuego, es el principal hallazgo de este año de la campaña de excavación en la Sima de los Huesos de la sierra de Atapuerca, que ha concluido el pasado miércoles.

Juan Luis Arsuaga, codirector de Atapuerca y responsable desde sus inicios del yacimiento de la Sima de los Huesos, ha detallado que en esta campaña se habían encontrado además algunos fragmentos pequeños de cráneo humano, dos restos de costilla y un diente. Pero ha sido este último día de campaña cuando se ha producido el hallazgo de este hueso de fémur, que representa la mitad superior de la diáfisis, que según Arsuaga aportará información "muy útil" sobre la estatura y peso de los Homo heidelbergensis, especie de la que se han encontrado restos de una treintena de individuos en las diferentes campañas de excavación. Por eso, el codirector de Atapuerca asegura que es posible que se pueda completar el fragmento encontrado este año con algún resto de campañas anteriores.

El nombre de este ancestro humano se debe a que los primeros restos se descubrieron en Heidelberg, Alemania. Se trata de un antepasado directo del hombre de Neandertal que vivió en el centro y el sur de Europa. Eran cazadores de grandes herbívoros. Transformaron el medio y humanizaron el paisaje que les rodeaba. Fueron los primeros en tomar conciencia de la muerte y lo transmitieron a través del lenguaje, creando una cultura que se extendió al resto del mundo. Esos fueron los primeros pasos del arte y el simbolismo.

Además, el nuevo hallazgo amplía la superficie del yacimiento con restos humanos y augura "grandes descubrimientos" en los próximos años de esta década. Según Arsuaga, la reducción en el número de fósiles humanos hallados este año en la Sima de los Huesos con respecto a otras campañas responde a que se ha intervenido en la zonas de contacto entre las arcillas con fósiles humanos de hace medio millón de años y el depósito posterior de huesos de oso y otros carnívoros como el león que están por encima. En este sentido, a lo largo de esta campaña se ha recuperado un gran número de fósiles de oso, entre los que destaca un cráneo muy completo.

Fuente: EL PAÍS