La Comisión Europea trabaja para mejorar la sostenibilidad ambiental en la cadena alimentaria

La Comisión Europea está centrando sus esfuerzos en la mejora de la sostenibilidad ambiental de la cadena alimentaria mediante la minimización del despilfarro de alimentos y la optimización de los envases de alimentos.

Según un estudio sobre el despilfarro de alimentos en la Unión Europea (VER), se calcula que cada año se tiran alrededor de 89 millones de toneladas de alimentos, lo que equivale a 179 kg de alimentos per cápita anuales.

La comida se desperdicia en todos los niveles de la cadena alimentaria. Así, los hogares son responsables del 42 % del despilfarro (en torno a 76 kg per cápita al año) y casi el 60 % de este despilfarro sería evitable si se mejora la concienciación y se hace un uso más eficiente de los alimentos, se planifican las compras, etc. La industria alimentaria es responsable del 39 % del total debido a fallos técnicos en la producción, productos defectuosos o daños en productos y envases.

También se despilfarran alimentos dentro de la distribución comercial, en torno al 5 % del total, debido a fallos en la cadena de suministro, mala gestión, estrategias de marketing inadecuadas, fallos de temperatura, etc. En cuanto a la restauración, es responsable del 14 % del uso indebido de los alimentos, debido a la obligación de hacer raciones individuales, la compra de stocks que no se utilizan y caducan, etc.

La Comisión estima que la lucha contra el despilfarro de alimentos debe ser una prioridad dentro de las políticas europeas y por tanto pide al Consejo y a los Estados miembros que hagan políticas adecuadas que eviten estas prácticas a lo largo de toda la cadena alimentaria. 
 
Fuente: EUROCARNE