Nuevos avances en la lucha contra el parásito causante de la malaria
El descubrimiento de cómo el parásito de la malaria sobrevive en la sangre de las personas infectadas puede servir para el desarrollo de nuevos fármacos para tratar esta enfermedad que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), causa la muerte cada año a 800.000 personas.
Se estima que hay más de 225 millones de personas en todo el mundo con malaria, la mayoría en los países africanos. Según la OMS, la mayoría de las muertes ocurren en niños que viven en África -cada 45 segundos muere un niño por su causa-. La enfermedad está causada por el parásito de la malaria, Plasmodium falciparum, que infecta a través de la picadura de la hembra del mosquito Anopheles.
Este avance es el resultado de una colaboración entre científicos de medicina en la Universidad de Leicester (Reino Unido) y un equipo del francés Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica (Inserm), que trabajan en el Centro Wellcome Trust de Parasitología Molecular en Glasgow (Escocia) y el Colegio Politécnico Federal de Lausanne (Suiza), y se publica hoy en Nature Communications.
«Nuestro estudio abre nuevas vías para buscar nuevos medicamentos contra la malaria», asegura Andrew Tobin, uno de los coordinadores del trabajo. «Hemos demostrado que un elemento fundamental necesario para que los parásitos de la malaria sobrevivan en el torrente sanguíneo humano es un grupo de enzimas llamadas proteínas quinasas. Si somos capaces de detener la actividad de estas proteínas podríamos eliminar los parásitos de la malaria», indica Christian Doerig, otro de los autores del estudio.
Los investigadores se encuentran actualmente buscando fármacos que hacen exactamente eso -detener la actividad de las proteínas quinasas. «Si lo logramos -subraya Doering-, entonces tendremos una nueva forma de matar al parásito de la malaria». Tobin considera que estamos ante un gran momento en la lucha contra esta terrible enfermedad que afecta principalmente a las personas más pobres del mundo.
Sin embargo los expertos advierten. «El parásito de la malaria es muy inteligente y ha sabido adaptarse a los distintos tratamientos farmacológicos y, al hacerlo, se vuelve resistentes a los medicamentos. De hecho, ya hay pruebas de que el parásito está desarrollando resistencia al tratamiento de primera línea más reciente de la malaria».
Para evitar que se produzca una resistencia generalizada a los tratamientos contra la malaria, destacan, hace falta una «batería continua de nuevos medicamentos contra la malaria. Nuestro descubrimiento es una vía muy atractiva».
Fuente: ABC