Una ternera muerta y 5 desaparecidas tras un nuevo ataque de lobos en Ávila
Una ternera muerta y otras cinco desaparecidas es el resultado de un nuevo ataque de lobos en la provincia de Ávila, según ha denunciado en una nota de prensa la Alianza por la Unidad del Campo, integrada por las organizaciones agrarias UPA y COAG. En esta ocasión, el ataque se ha producido en una explotación ganadera situada en el municipio de Narros del Puerto (41 habitantes), situado a 35 kilómetros al suroeste de la capital abulense, en dirección a la Sierra de Gredos.
El propietario de esta explotación, Salva Menéndez, ha visto cómo una de sus terneras ha aparecido muerta, mientras otras cinco se encuentran desaparecidas, de ahí su "temor" a que todas ellas puedan aparecer muertas igualmente. No se trata del último ataque de lobos sufrido por esta explotación ganadera, ya que en los últimos meses ha perdido ya varias cabezas de ganado, según ha detallado en el comunicado. Según UPA y COAG, el nivel de "impotencia" y "rabia" del propietario de la explotación es tal, que califica de "bochornoso" el hecho de que desde la Junta de Castilla y León "no se hayan hecho cargo de la denuncia presentada el día 8 de diciembre por ser día festivo, como si los lobos el día de la Constitución no atacaran".
Asimismo, el ganadero ha calificado de "algo más que anecdótico" que cada vez que se acercan agentes medioambientales por los montes de su término municipal "se produzca un ataque de lobos pocas horas después. "Tres veces los he visto por aquí y tres veces me han atacado los lobos justo al día siguiente de sus visitas", ha asegurado Salva Menéndez.
La Alianza por la Unidad del Campo ha explicado que hace unos días fue abatido un lobo en Tornadizos de Ávila, a escasos kilómetros de la capital, pocas horas después de producirse una oleada de ataques en las cercanías del centro urbano, muy próximo al complejo de Naturávila. En este contexto, han calificado de "insólita" la actual situación, con una "presión inaguantable para los ganaderos", mientras la Consejería de Medio Ambiente "se limita a hacer público ante los medios de comunicación, que no ante las Opas, un seguro privado que rechaza el sector de forma unánime, haciendo recaer sobre los productores toda la responsabilidad de los ataques". Por ello, tanto UPA como COAG han sostenido que "no se conseguirá acabar con la situación actual dejando que el problema se solucione por sí solo", ya que en su opinión "la realidad apunta a que cada vez hay más ataques y más pérdidas para los productores". Desde su punto de vista, "la única solución pasa por controlar responsablemente la especie" y la Junta de Castilla y León "indemnice justamente los daños que provocan estos animales salvajes a la ganadería extensiva".
Fuente: AGROINFORMACIÓN