Los expertos no consideran alarmante el hecho de que un gato haya muerto en Alemania infectado por el virus de la gripe aviar
El hecho de que haya aparecido en Alemania un gato muerto infectado por el virus de la influenza a viar, ha vuelto a desatar la alarma entre los ciudadanos españoles. En la presentación del III Master en Seguridad Alimentaria en el Colegio de Veterinarios de Madrid, los periodistas congregados interrogaron sobre el tema algunos de los invitados al acto.
Uno de ellos, Juan José Badiola, Presidente del Consejo General de Colegios Veterinarios de España, alertó sobre la agresividad de este virus, capaz de infectar a un gato, aunque recordó que ya se habían dado casos en tigres y leopardos. A su juicio, el contagio del gato podría deberse a la ingestión de vísceras de aves infectadas, dado que se ha producido en la misma zona donde se ha detectado el mayor foco de gripe en Alemania. Recomendó ante todo, mantener la calma y "no sacar las cosas de quicio", pero desaconsejó a los ciudadanos la recogida de aves y pidió que hagan uso de los servicios veterinarios
Por su parte, el director de Ganadería del Ministerio de Agricultura, Carlos Escribano, presente en este mismo acto, manifestó que ya se conocían casos de transmisión entre especies y que es una enfermedad registrada desde 1878. Reiteró la extrema vigilancia que se está llevando a cabo en España, siguiendo las directrices europeas, y que el ritmo de análisis en el laboratorio de referencia es de 500 animales diarios, todos negativos.
Por otro lado, en declaraciones realizadas a la agencia EFE, El catedrático de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de Madrid, José Manuel Sánchez Vizcaíno ha explicado que ya se conocía la facilidad del virus de la gripe aviar H5N1 para pasar a otras especies, pero destacó la "enorme dificultad" de que se transmita de gatos a humanos, ya que ni se ha detectado la transmisión entre gatos.
Tras hallarse el primer caso de un gato muerto con gripe aviar en Europa (Alemania), Sánchez Vizcaíno recordó cómo desde un principio se comprobó en Asia que el citado virus tenía capacidad de pasar a los felinos, a los seres humanos o a los cerdos, a pesar de que ese "paso interespecie es muy difícil".
Lo que no se ha detectado, añadió Sánchez-Vizcaíno, es que el virus pase de un gato a otro gato, de un humano o otro, o de un cerdo a otro. Eso demuestra, recalcó, que el virus no se adapta al gato, con lo que sería "muy difícil" que de ese animal pasara a las personas.