Cataluña elabora un modelo nuevo de inspección en establecimientos alimentarios
El Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña ha elaborado un nuevo modelo de inspección de los establecimientos alimentarios basado en los diferentes criterios de riesgo asociados a cada comercio. Su aplicación implicará a las más de 18.000 empresas del sector alimenticio y 60.000 establecimientos de restauración y de venta minorista que están inscritos en el Registro Sanitario de Cataluña.
El objetivo de este nuevo modelo es mejorar el nivel de protección de la salud pública. Para ello, determinará de forma objetiva el riesgo de cada empresa del sector, obtendrá una clasificación de los establecimientos de Cataluña mediante criterios homogéneos, y definirá las frecuencias de inspección, según los riesgos que presente cada local.
A la espera de que los profesionales del sector aporten sus recomendaciones o propuestas de mejora, el sistema establece ocho módulos o tipos de riesgo, atendiendo a criterios como el tipo de producto que vende o elabora el establecimiento, el tamaño de la empresa, su historial, las instalaciones que posee o las medidas de autocontrol que se llevan a cabo.
A cada apartado se le adjudica una puntuación, que será mayor cuanto más alto sea el riesgo que presenta, de manera que la puntuación máxima que pueda lograr sea de 140 puntos. No obstante, hay empresas que parten con un número de puntos adicionales, a modo de penalización, debido a que su actividad tiene una especial incidencia en la salud pública, como es el caso de las compañías de catering.
Las empresas que obtengan una puntuación inferior a 30 puntos serán consideradas de riesgo «muy bajo», las que tengan entre 45 y 64 se enmarcarán en el nivel de riesgo medio, y las que superen los 85 puntos serán consideradas de riesgo «muy alto».