La autoridad europea para la seguridad de los alimentos (EFSA) ya ha explicado que no existe ninguna evidencia de que los alimentos sean un vehículo de transmisión del COVID-19, no obstante, es nuestra responsabilidad extremar las medidas para asegurar la inocuidad de los alimento
Los inspectores veterinarios de salud pública son, con carácter legal, autoridades sanitarias responsables, entre otros, del control de supermercados y diferentes negocios alimentarios y estos servicios son 'puntos calientes de la situación de alerta', ya que permanecerán abiertos y la mayoría de la población necesitará acudir a ellos
La Asociación de Veterinarios Especialistas en Seguridad Alimentaria (Avesa), atendiendo las medidas preventivas acordadas por el Ministerio de Sanidad con las comunidades autónomas, ha decidido suspender temporalmente la celebración de este evento que estaba previsto que tuviera lugar del 7 al 8 de mayo próximos
Es poco probable que el Covid-19 se transmita a través de los alimentos y todavía no hay evidencia de que esto ocurra, según ha especificado la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA)
En el Consejo de Ministros de este martes 10 de marzo se ha acordado que sea el Ministerio de Sanidad el que acoja Aesan, así como la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), que quedarán supeditadas a la Secretaría General de Sanidad (antes Secretaría General de Sanidad y Consumo)
El virus se está propagando de persona a persona, principalmente a través de los estornudos o de la tos y los científicos y las autoridades de todo el mundo están monitorizando la propagación del virus y no ha habido ningún informe de transmisión a través de los alimentos
El control del consumo y comercio es tremendamente difícil por tres motivos: la falta de estadísticas porque no queda registrado, poblaciones enormes y con tradiciones muy arraigadas y la escasez de medios para aplicar la ley.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) ha publicado un informe en el que se avisa de que la salmonella, al igual que el campylobacter, se están volviendo resistentes a múltiples fármacos y, en concreto, a la ciprofloxacina, uno de los antibióticos de elección para tratar las infecciones en humanos causadas por estas bacterias